Corona de reparación y de confianza en el Divino Corazón de Jesús
Presentación del autor
Contemplando por años al Sagrado Corazón de Jesús y leyendo en particular los escritos de Santa Margarita Maria Alacoque, de San Claudio De La Colombiere, de Santa Faustina Kowalska y del Siervo de Dios Don Francesco Mottola, nació la inspiración de una oración contemplativa que comprendiese toda esta espléndida espiritualidad, actualísima para nuestro tiempo. La Corona de reparación y de confianza en el Divino Corazón de Jesús se inserta en el misterio del Amor Divino, de Su infinita misericordia, de Su total perdón y del pleno abandono que el corazón del creyente puede hacer con plena confianza en el Corazón del Salvador. El Apóstol Pablo ha admirablemente sintetizado todos estos aspectos de la verdadera espiritualidad cristiana en la carta a los Romanos: ¨¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿El sufrimiento, la angustia, la persecución, el hambre, la desnudez, el peligro, la espada? … Pero Dios, que nos ama, hará que salgamos victoriosos de todas estas pruebas, porque estoy seguro de que ni muerte, ni vida, ni ángeles, ni otras fuerzas sobrenaturales, ni lo presente, ni lo futuro, ni poderes de cualquier clase, ni lo de arriba, ni lo de abajo, ni cualquier otra criatura, podrá separarnos del amor de Dios manifestado en Cristo Jesús, Señor nuestro.¨ (Rm 8, 35-39). Con este acto pleno de reparación y de confianza en el Amor de Cristo, recitando devotamente esta santa Corona, recibiremos infinitas gracias espirituales y materiales del Divino Corazón del Salvador.
Sac. Pietro Cutuli
CORONA DE REPARACIÓN Y DE CONFIANZA EN EL DIVINO CORAZÓN DE JESÚS
ORACIÓN INICIAL
Señor Jesucristo, Que te has revelado como Amor infinito y Misericordia, por intercesión del Corazón Inmaculado de María, acoge este acto de reparación de nosotros, pobres pecadores, contra todas las blasfemias, la desacralización eucarística, las ofensas a Tu Divino Amor, y al amor fraterno. Con esta oración nos consagramos y nos abandonamos a Tu santa voluntad, por intermedio del Corazón Inmaculado de María, en todas las situaciones de la vida y abandonamos, con plena confianza en tu Divino Corazón todos nuestros deseos y esperanzas, siendo agradecidos al Padre Celestial y así obtener todas las gracias materiales y espirituales necesarias para nuestra salvación eterna en la gozosa comunión de los santos.
Amén
Jesús, manso y humilde de Corazón, Haz nuestro corazón semejante al Tuyo.
Corazón Inmaculado de María Ruega por nosotros
1. En el primer misterio contemplamos a Jesús, llamando a toda la humanidad, para restaurarla con Su Divino Amor. Del Evangelio según San Mateo (11,28-30):
En aquel tiempo Jesús dijo: ¨Vengan a Mí todos los que están fatigados y agobiados, y Yo los aliviaré. Carguen con mi yugo y aprendan de Mí, que soy sencillo y humilde de Corazón y encontrarán descanso para sus vidas. Por que mi yugo es suave y mi carga ligera¨.
Padre nuestro… Dios te salve María… 10 veces: Divino Corazón de Jesús Confío y espero en ti
Gloria al Padre…
Jesús manso y humilde de Corazón, Haz nuestro corazón semejante al Tuyo.
Corazón Inmaculado de María, Ruega por nosotros
2. En el segundo misterio contemplamos a Jesús dejando a sus discípulos el mandamiento nuevo del amor fraterno. Del Evangelio según San Juan (15, 9-12):
En aquel tiempo Jesús dijo: ¨Como el Padre me ama a mí, así los amo Yo a ustedes. Permanezcan en mi Amor. Pero sólo permanecerán en mi Amor, si ponen en práctica mis mandamientos, lo mismo que Yo he puesto en práctica los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he dicho todo esto, para que participen en mi alegría, y su alegría sea completa. Mi mandamiento es este: ¨Amense los unos a los otros como yo los he amado¨.
Padre nuestro… Dios te salve María… 10 veces: Divino Corazón de Jesús Confío y espero en ti
Gloria al Padre…
Jesús manso y humilde de Corazón, Haz nuestro corazón semejante al Tuyo.
Corazón Inmaculado de María, Ruega por nosotros
3. En el tercer misterio contemplamos a Jesús en la última Cena cuando instituye la Eucaristía. Del Evangelio según San Lucas (22, 14-20):
Llegada la hora, Jesús se sentó a la mesa con sus discípulos. Y les dijo: ¨¡Cómo he deseado celebrar esta pascua con ustedes antes de morir! Porque les digo que no la volveré a celebrar hasta que tenga su cumplimiento en el Reino de Dios¨. Tomó entonces un cáliz, dio gracias y dijo: ¨Tomen esto y repártanlo entre ustedes; pues les digo que ya no beberé el fruto de la vid hasta que llegue el Reino de Dios¨. Después tomó pan, dio gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos diciendo: ¨Esto es mi cuerpo, que se entrega por ustedes; hagan esto en memoria mía¨. Y después de la cena, hizo lo mismo con el cáliz diciendo: ¨Este es el cáliz de la nueva alianza sellada con mi sangre, que se derrama por ustedes¨.
Padre nuestro… Dios te salve María… 10 veces: Divino Corazón de Jesús Confío y espero en ti
Gloria al Padre…
Jesús manso y humilde de Corazón, Haz nuestro corazón semejante al Tuyo.
Corazón Inmaculado de María, Ruega por nosotros
4. En el cuarto misterio contemplamos a Jesús cuando desde lo alto de la cruz tiene sed de amor y de salvación de las almas y por ello desgarra su Divino Corazón derramando toda su sangre. Del Evangelio según San Juan (19, 28-35):
Después, Jesús, sabiendo que todo se había cumplido, para que también se cumpliera la escritura, exclamó: ¨Tengo sed¨ Había allí una jarra con vinagre. Los soldados colocaron en la punta de una caña una esponja empapada en el vinagre y se la acercaron a la boca. Jesús probó el vinagre y dijo: ¨Todo está cumplido¨. He inclinando la cabeza entregó el espíritu. Como era el día de la preparación de la fiesta de pascua, los judíos no querían que los cuerpos no quedaran en la cruz aquel sábado, ya que aquel día se celebraba una fiesta muy solemne. Por eso pidieron a Pilato que ordenara romper las piernas a los crucificados y que los bajaran de la cruz. Fueron pues, los soldados y rompieron las piernas a los dos que habían sido crucificados con Jesús. Cuando se acercaron a Jesús, se dieron cuenta de que ya había muerto; por eso no le rompieron las piernas. Pero uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza y, en seguida, brotó del costado sangre y agua. El que vio estas cosas da testimonio de ellas, y su testimonio es verdadero. Él sabe que dice la verdad, para que también ustedes crean.
Padre nuestro… Dios te salve María… 10 veces: Divino Corazón de Jesús Confío y espero en ti
Gloria al Padre…
Jesús manso y humilde de Corazón, Haz nuestro corazón semejante al Tuyo.
Corazón Inmaculado de María, Ruega por nosotros
5. En el quinto misterio contemplamos a Jesús resucitado, confirmando a Tomás y a todos sus discípulos en la fe. Del Evangelio según San Juan (20, 24-29):
Tomás, uno del grupo de los Doce, a quién llamaban ¨El Mellizo¨, no estaba con ellos cuando se le apareció Jesús, le dijeron pues, los demás discípulos: ¨Hemos visto al Señor¨. Tomás les contestó: ¨Si no veo las señales dejadas en sus manos por los clavos y no meto mi dedo en ellas, si no meto mi mano en la herida abierta en su costado, no creeré¨. Ocho días después se encontraban de nuevo reunidos en casa todos los discípulos de Jesús. Estaba también Tomás. Aunque las puertas estaban cerradas, Jesús se presentó en medio de ellos y les dijo: ¨La paz esté con ustedes¨. Después dijo a Tomás: ¨Acerca tu dedo y comprueba mis manos; acerca tu mano y métela en mi costado. Y no seas incrédulo sino creyente¨. Tomás contestó: ¨¡Señor Mío y Dios Mío!¨ Jesús le dijo: ¨¿Has creído porque me has visto? Dichosos los que han creído sin haber visto¨.
Padre nuestro… Dios te salve María… 10 veces: Divino Corazón de Jesús Confío y espero en ti
Gloria al Padre…
Jesús manso y humilde de Corazón, Haz nuestro corazón semejante al Tuyo.
Corazón Inmaculado de María, Ruega por nosotros
Dios te salve Reina y Madre de Misericordia…
(Letanías del Sagrado Corazón o de la Divina Misericordia)
ORACIÓN FINAL
Señor Jesús, Tú que eres el principio y el fin De cada cosa creada y de la historia humana. Tu que te has hecho hombre para reconducir La humanidad dispersa al Corazón del Padre Celestial Y has dado la vida sacrificándola por amor a nosotros Sobre el leño de la cruz y resurgiendo Nos has dado la esperanza de la vida eterna, Continúa desde Tu trono de gloria difundiendo sobre el mundo El río de misericordia que emana de tu costado desgarrado.
Continúa a hacernos sentir el deseo que tienes de nuestra vida Cuando dijiste: ¨Tengo sed¨ Haz que nuestros corazones endurecidos se abran a tu deseo de amor Y nosotros podamos intercambiar el sacrificio de tu vida Con el sacrificio de nuestra vida por amor hacia Ti y hacia nuestros hermanos.
Que la Eucaristía sea el centro de nuestra vida espiritual Que tu Corazón repleto de amor y de vida en la Sagrada Eucaristía Sea el alimento mas deseado de nuestro espíritu De modo que nutriéndonos con sumo amor y respeto hacia Ti Podamos repara las infinitas desacralizaciones, ingratitudes e indiferencias Que muchísimos de Tus discípulos y hombres sin fe tienen hacia Tu Cuerpo y Tu Sangre Y así obtener las infinitas gracias espirituales y materiales Que Tu Corazón Eucarístico encierra.
Que la Santísima Virgen María, Tuya y nuestra tierna madre, Reciba en Su Corazón Inmaculado estos nuestros propósitos y Te los presente Para que Tú los acojas
Amen
Localitá Salvatore, 05/11/2004. Primer Viernes del Mes dedicado al Sagrado Corazón de Jesús
Nulla Osta de la Curia Arzobispal de Mileto (VV) 17/11/2004 Vicario General
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